El arte callejero uruguayo comenzó a tomar fuerza en los años 80
Diario La R
Grupo R Multimedio
por Víctor Palacios
10 de septiembre de 2025
El arte callejero en Uruguay abarca una gran variedad de estilos y técnicas, desde murales y graffitis hasta instalaciones y arte efímero.
La cultura del arte callejero en Uruguay ha emergido como una forma vibrante y significativa de expresión artística, especialmente en la capital, Montevideo. Este fenómeno se ha desarrollado a lo largo de las últimas décadas y refleja una fusión de influencias locales e internacionales, así como un contexto social y político particular.
El arte callejero uruguayo comenzó a tomar fuerza en los años 80, en un período de transición democrática tras años de dictadura. Los artistas utilizaron las calles como un espacio para expresar sus inquietudes, críticas sociales y deseos de libertad. Esta forma de arte se convirtió en una herramienta para visibilizar problemas sociales, políticos y culturales, a menudo abordando temas como la memoria histórica, la identidad nacional y la lucha por los derechos humanos.
El arte callejero en Uruguay abarca una gran variedad de estilos y técnicas, desde murales y graffitis hasta instalaciones y arte efímero. Los murales, en particular, han ganado notoriedad, convirtiendo paredes y edificios en lienzos que cuentan historias y reflejan la vida cotidiana. Los artistas suelen abordar temáticas que resuenan con la comunidad, como la desigualdad social, la cultura popular y la resistencia cultural.
Entre los exponentes más reconocidos del arte urbano uruguayo se encuentran figuras como Jaz, Pablo «Pitu» González y Mauro D’Marco, quienes han dejado su huella en las calles de Montevideo y han participado en exposiciones a nivel internacional. Estos artistas no solo se enfocan en la estética, sino que también buscan generar un diálogo con su entorno y fomentar la reflexión sobre la realidad social.
Montevideo cuenta con varios espacios y festivales dedicados al arte callejero, como el Festival Internacional de Arte Callejero, que reúne a artistas locales e internacionales para transformar el paisaje urbano. Además, la ciudad ha visto un creciente apoyo de instituciones y colectivos que promueven el arte urbano como una forma legítima de expresión cultural.
El arte callejero en Uruguay ha logrado trascender las fronteras del simple vandalismo, siendo cada vez más reconocido como una forma de arte legítima que enriquece el patrimonio cultural de la ciudad. Ha contribuido a revitalizar barrios, atraer turismo y fomentar un sentido de comunidad, al tiempo que proporciona una plataforma para la voz de aquellos que a menudo son marginados en la sociedad.Conclusión
En resumen, la cultura del arte callejero en Uruguay es un fenómeno dinámico que continúa evolucionando, reflejando las luchas y aspiraciones de su gente. Con su rica historia y su capacidad para desafiar normas, el arte urbano uruguayo se establece como un componente esencial de la identidad cultural del país, invitando a la reflexión y al diálogo en el espacio público.
El arte callejero uruguayo comenzó a tomar fuerza en los años 80